Ser periodista bajo el culto del miedo y la muerte
 
  Capítulo 3 (Presentación)  
 


Este material fue producido en 1999 por The Freedom Forum y por Un Ojo Avizor en los Medios.

La pol�tica represiva de la conducci�n militar que tom� el poder del Estado el 24 de marzo de 1976 tuvo como uno de sus objetivos principales la decisi�n de exterminar tanto a los activistas gremiales, sociales y pol�ticos cuyos postulados implicasen propuestas de transformaci�n social como a quienes simpatizaran con sus ideas o se opusieran al r�gimen. Para ello, las Juntas Militares -que gobernaron hasta 1983- institucionalizaron un sistema clandestino de represi�n, basado en el secuestro y la desaparici�n de ciudadanos, su detenci�n en campos de concentraci�n, la aplicaci�n de tortura y el asesinato.

La implementaci�n del terror se extendi� tambi�n a la esfera cultural. Se establecieron mecanismos de censura y restricciones a la circulaci�n de informaci�n. Quema de libros, listas negras de actores, escritores y directores, y amenazas, asesinatos y exilio de periodistas, fueron algunos de los medios utilizados para destruir la literatura pol�tica y limitar las fuentes de futuras cr�ticas.

En este marco, el 15 de septiembre de 1980 se sancion� la Ley Nacional de Radiodifusi�n (Ley 22.285/80) que regula el sistema de radiodifusi�n en la Argentina y que, aunque con modificaciones, continua vigente. En la actualidad esa ley est� siendo objeto de debate con la intenci�n de reemplazarla por una que democratice el acceso a los medios de comunicaci�n, favorezca la pluralidad de voces y regule la concentraci�n y la conformaci�n de grandes multimedios.

El tercer cap�tulo de Ser periodista bajo el culto del terror y la muerte explora el rol de la prensa, de los periodistas y de la ciudadan�a entre 1978 y 1982. El Campeonato Mundial de F�tbol de 1978, la visita de la Comisi�n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la llamada "Campa�a antiargentina", el "Conflicto del Beagle" y la Guerra de Malvinas son algunos de los ejemplos abordados a trav�s de testimonios, fragmentos audiovisuales y art�culos publicados en los medios de la �poca.